Fingieron ser electricistas para entrar a una casa y mataron a una mujer
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Los delincuentes eran dos. Cortaron la luz del monoblock donde vivía la víctima de 67 años. Cuando ella abrió la puerta de su departamento ingresaron.
En la noche de este lunes, el personal de Homicidios de Villa Mercedes, Policía Científica y otras divisiones de la fuerza todavía inspeccionaban el departamento de Mafalda Sánchez. Según la información que recabaron hasta ese momento, pasado el mediodía, dos hombres se presentaron en el departamento de la mujer y, con la excusa de ser empleados de una empresa de servicio eléctrico, ingresaron a su domicilio. Una vez dentro, la mataron.
Al tiempo que los investigadores revisaban el departamento, el cuerpo de la víctima permanecía en la Morgue Judicial del Policlínico Regional. Si bien trascendieron varias versiones extraoficiales que indicaron que había sido golpeada y estrangulada, una fuente policial que estuvo en la escena del crimen solo confirmó que “presentaba lesiones en la cabeza y el rostro”.
El homicidio ocurrió entre las 13 y las 14. Sánchez tenía 67 años y vivía en un monoblock ubicado a la altura de Chacabuco al 140, casi esquina Las Heras. Era muy conocida en el barrio y una “persona muy querida”, así la definieron varios vecinos, amigos y personas que la conocían, y que se acercaron a su domicilio luego de enterarse del asesinato a través de las redes sociales y los medios de comunicación.
Al parecer, unos minutos antes del crimen, la mujer le había pedido a su nieto, de unos 13 años, que fuera a comprar a un kiosco, que está a una cuadra de allí. Apenas salió el adolescente de la casa de su abuela, dos hombres abrieron la caja metálica donde está el tablero eléctrico de ese monoblock.
Los tableros del servicio eléctrico en ese barrio están situados al pie de las escaleras, a un costado de los pasillos, y cualquiera puede acceder a ellos. Un vecino de la víctima, quien, al igual que ella, vive en la planta baja, contó que notó a dos hombres en dicho tablero. “Tenían cajas y una mochila. Pensé que estaban trabajando”, recordó. Luego vio que uno de ellos se quedó ahí, como “controlando algo”, y el otro “desapareció”.
Las maniobras de esos dos sospechosos dejaron sin luz el departamento de Sánchez. Y, a partir de ese momento, no está claro qué fue lo que pasó.
Los investigadores no habían logrado establecer si la mujer abrió la puerta de su departamento para ver lo que sucedía afuera o si quienes manipularon el tablero tocaron su puerta y se presentaron como empleados del servicio eléctrico, y le pidieron permiso para entrar a su casa y solucionar el desperfecto técnico.
Lo único certero es que después de eso, Sánchez fue golpeada. Su cuerpo fue encontrado en el piso, boca abajo.
Una primera versión extraoficial indicó que el interior de la vivienda estaba revuelto. Sin embargo, hasta la noche de este lunes, los policías que inspeccionaban el lugar no habían “logrado establecer si faltaba alguna pertenencia de la casa”, refirió la fuente policial que estuvo allí.
En el transcurso de la tarde, los investigadores también trabajaron con la División Canes. Hicieron que una perra especializada en la búsqueda de personas olfateara una gorra verde con una visera naranja, muy probablemente un elemento que hallaron dentro del domicilio de la víctima o cerca de allí. El animal siguió el rastro de quien usaba la gorra casi tres cuadras, pero luego perdió la orientación.
Cerca de las 18, el cuerpo de Sánchez fue trasladado a la Morgue Judicial. En el monoblock del barrio La Rioja continuaban los policías y los fiscales Maximiliano Bazla, Gastón Yllera y Gisella Milteins, quienes dijeron que por el momento no hablarían con la prensa. Por su parte, la fiscal instructora, Daniela Torres, sobre quien recae la investigación del homicidio, aclaró que no hablará sobre la causa de la muerte hasta no tener el resultado de la autopsia.
El cuerpo de Sánchez fue encontrado por su hija, Soledad, refirieron. La mujer es empleada en el área de personal de la Municipalidad. De hecho, la víctima supo trabajar muchos años allí; era miembro del Partido Justicialista y una persona muy estimada en el ámbito municipal.
Germán Sepúlveda, secretario de Gobierno de la Municipalidad, se acercó a la esquina de Chacabuco y Las Heras. “Era muy querida en el ámbito político y que pase este hecho horroroso hace que vengamos y nos pongamos a disposición de sus hijos, quienes también trabajan con nosotros y los conocemos de hace mucho tiempo”, expresó el funcionario. “Mafalda era nuestro personaje de la Municipalidad; nos visitaba y charlaba con todos”, recordó.